El ministro de Interior español, Jorge Fernández./ Foto: CPD/La Razón.
The Diplomat. Madrid
España y Francia quieren que la Unión Europea nombre un coordinador de inmigración para contribuir a frenar la avalancha de personas que tratan de entrar en territorio comunitario de manera irregular. Ese fue uno de los acuerdos alcanzados en la reunión mantenida ayer en Barcelona por los ministros de Interior de ambos países, Jorge Fernández Díaz y Bernard Cazeneuve.
Los dos ministros se mostraron igualmente de acuerdo en apoyar el lanzamiento, lo antes posible, de la nueva operación europea de vigilancia de las fronteras marítimas, que lleva el nombre de “Frontex Plus”. La nueva operación tomará el relevo, de manera gradual, de la “Mare Nostrum” conducida por Italia, que es uno de los países que más sufren la presión migratoria a través del Mediterráneo, hasta el punto de que desde el comienzo de año, unos 100.000 inmigrantes han tratado de llegar de manera irregular a las costas italianas.
Los ministros de Interior de los dos países se reunieron ayer en Barcelona
España se muestra muy interesada en que la implicación europea en la vigilancia de las fronteras del Sur de Europa, ya que, después de Italia es la que más inmigrantes está recibiendo, a través del estrecho de Gibraltar o de los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla.
El ministro español manifestó que el Gobierno es consciente de la desesperación que lleva a esas personas a intentar entrar en Europa, pero insistió en que España, al ser frontera exterior de la UE, tiene la obligación de proteger la inviolabilidad de esas fronteras.
Por su parte, Cazeneuve, quien señaló que también la UE debe tratar de dar una solución “humana” a quienes emigran por formar parte de minorías perseguidas, abogó por intensificar la cooperación entre la UE y terceros países para luchar contra la inmigración irregular, con programas de desarrollo y tratando de aumentar la seguridad en sus fronteras.