Estudiantes de ambos lados del Atlántico se beneficiarán de los planes de intercambio.
Eva Cantón. Madrid
En el repertorio de asuntos que se perfilan de cara a la próxima Cumbre iberoamericana que se celebrará en diciembre en la ciudad mexicana de Veracruz está impulsar la movilidad de estudiantes e investigadores a través del continente. Una versión latinoamericana del Erasmus europeo para la que sobra voluntad política y falta dinero.
Quizás la visita de Estado del presidente Enrique Peña Nieto a España pueda allanar el camino mientras los rectores de universidades españolas e iberoamericanas trabajan ya para lanzar al menos un germen de esta “gran carretera del conocimiento” que defendió recientemente en Madrid el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) José Narro Robles.
El rector mexicano entiende que hay experiencias y mecanismos suficientes como para hacer un esfuerzo financiero y animó a potenciales patrocinadores a seguir el ejemplo de la Red de Universidades de Iberoamérica, Universia, que cuenta con el mecenazgo del Banco Santander.
Algunas universidades españolas e iberoamericanas han comenzado a debatir su establecimiento
Desde la UNAM se quiere ver una implicación de los Gobiernos iberoamericanos para crear una “bolsa común” que permita a estudiantes y académicos visitar otras universidades y establecer redes de investigación. Ello puede servir, además, para darle un impulso a la lengua española.
Mientras llega ese momento, algunas universidades españolas e iberoamericanas (Alcalá de Henares, Salamanca, Buenos Aires, Sao Paulo y México) han comenzado los contactos para debatir el establecimiento del futuro Erasmus y abrir el paso a otras academias.