Foto: A.R.
Ignacio Ybáñez
Secretario de Estado de Asuntos Exteriores
Alberto Rubio. Madrid
El próximo 23 de octubre Naciones Unidas cumplirá 70 años. “Es una buena fecha para plantearnos las cosas que no funcionan, también las que funcionan, y para hacer balance”, señala el secretario de estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez, en su despacho del Ministerio. Recién llegado de Nueva York, donde España preside este mes el Consejo de Seguridad de la ONU, tiene ante sí la perspectiva de un intenso mes de trabajo.
¿Naciones Unidas se ha visto superada por los tiempos?
Esta semana ha sido una buena demostración de su potencial. El nivel de representación ha sido altísimo. España ha estado representada al máximo nivel por Su Majestad el Rey. Ha estado incluso el Papa. Eso demuestra que la ONU es el lugar aceptado por todos para discutir las grandes cuestiones internacionales.
Pero podría ser más eficaz, ¿no?
Es cierto. Entre otros ámbitos, en el Consejo Seguridad. A veces el Consejo no ha sido capaz de tomar decisiones por vetos como el ruso en el caso de Siria, por citar el más reciente. Por ello, Francia propone que, en casos como crímenes contra la humanidad, los miembros permanentes puedan autolimitar su derecho de veto. Y que lo proponga Francia tiene mucho valor, aunque será difícil que lo acepten los otros cuatro miembros permanentes, sobre todo China y Rusia. Ya veremos.
¿Qué balance hace de la reciente semana ministerial?
Muy positivo. Es impresionante la cantidad de reuniones que ha habido y, desde la Cumbre del Desarrollo, donde el Rey subrayó los objetivos de España hasta 2030, hemos estado en todas. Ahora se trata de aprovechar nuestra presencia en el Consejo Seguridad para poner en valor lo que España puede aportar a la comunidad internacional.
¿Operaciones de paz, por ejemplo?
Hay cada vez más demanda de operaciones de paz por parte de la ONU y eso exige que los estados miembros contribuyan más. Nosotros, además de Líbano y otras operaciones, mantenemos nuestro compromiso con las misiones de la ONU.
También se busca un compromiso contra el terrorismo…
Hemos presentado todo lo que hemos hecho respecto a los combatientes extranjeros, como la reciente operación contra el yihadismo junto a Marruecos. Es un buen ejemplo de que no sólo se trata de combatir el terrorismo, sino de hacerlo junto a otros países.
¿Por eso propone España un tribunal internacional antiterrorista?
La idea, que lanzamos con Rumanía, tuvo una buena acogida. Queremos crear un grupo de países con el mismo objetivo: encausar a los terroristas, sea donde sea. Se puede crear una nueva instancia o utilizar las que ya existen. Seguimos trabajando en ello.
En el debate abierto del Consejo también se habló de terrorismo.
Sí. Rusia escogió como tema el terrorismo en Oriente Medio, sobre el que quería obtener alguna resolución, pero no fue posible. Fue un debate muy complicado porque coincidió con el anuncio de las primeras acciones rusas en Siria. Nosotros estamos de acuerdo, como todos, en combatir contra Daesh pero hay que buscar formulas de concertación internacional.
¿Esas acciones de Rusia no ponen en peligro el multilateralismo?
Aunque el Consejo no ha podido avanzar en la crisis siria, lo ha hecho en las resoluciones contra Daesh, que nos permiten actuar en Irak igual que a los rusos en Siria. En el fondo estamos de acuerdo en combatir a Daesh y en que es necesaria una transición política en Siria. Pero, aunque estamos de acuerdo en que Assad no puede ser parte del futuro, en el corto plazo tenemos que discutir con el régimen. Y eso sigue siendo tema de bloqueo en el Consejo.
¿Se ha avanzado algo en Libia?
Se celebró una reunión en la que hubo unanimidad sobre que es imprescindible que las partes cumplan los acuerdos para constituir un Gobierno de Unidad Nacional.
¿Y qué pasa con Palestina?
Además del simbólico izado de la bandera palestina, en la reunión del comité sobre los acuerdos de Oslo se reflejó la grandísima tensión que hay entre ambas partes. Lo importante es que la situación actual no es sostenible y es imprescindible un esfuerzo de la Comunidad Internacional para obligar, si es necesario, a que los interlocutores se sienten a hablar.
¿Va a ser un octubre intenso para España en el Consejo de Seguridad?
Sí. El día 13 habrá un debate abierto para evaluar la resolución 1325 sobre Mujer, Paz y Seguridad, que presidirá el presidente Gobierno para mostrar la importancia que le damos. El 20, abordaremos la metodología de trabajo en la ONU, incluido cómo funciona el Consejo, el derecho de veto o la forma de elegir al secretario general. El 21 tendremos un debate sobre terrorismo, con participación de las víctimas, que presidirá el ministro de Interior. Y hay mucho más.
¿Qué otras iniciativas plantea España?
Con ocasión del 23 de octubre, queremos recordar, quizá en una resolución, que todo lo recogido en el preámbulo de la Carta sigue estando vigente. Valores como paz, seguridad, integridad territorial están vigentes, pero no está mal reiterarlo.