Portada del último informe del Latinobarómetro.
Alberto Rubio. Madrid.
Los ciudadanos latinoamericanos ven mejor a sus respectivos países y relativamente peor a otros -EE UU, España o Japón, por ejemplo- a los que tradicionalmente habían valorado con notas más altas. El último Latinobarómetro, titulado «La imagen de los países y sus democracias», constata un cierto optimismo económico de una parte de América Latina y, por otra parte, que la idea de democracia que tienen los ciudadanos en la calle no es la misma que la de politólogos o periodistas.
Los propios redactores de este estudio de opinión sugieren que los encuestados pueden haber respondido de acuerdo a una simple equivalencia: cuanto mejor le va a un país, mayor nivel de democracia se le adjudica. Además, en el caso de España y de la Unión Europea en particular, es probable que la crisis económica, con consecuencias nefastas para muchos emigrantes latinoamericanos, haya aumentado las opiniones negativas. “La evidencia que aquí presentamos muestra que la visión del mundo está más anclada en los resultados tangibles de lo que una democracia o un país puede entregar a sus ciudadanos que por sus instituciones o normas”, se dice en la introducción al informe.
De esa forma, a la pregunta de “¿Cuán democrático es (determinado país)?, las respuestas que arroja el Latinobarómetro son tan sorprendentes como, por ejemplo, que la diferencia entre EE UU y China en términos de democracia sea tan sólo de 1,6 puntos en una escala de 10.
La valoración de la democracia en EE UU y América Latina tan sólo está separada por siete décimas
Tomando el 1 como “nada democrático” y el 10 como “completamente democrático”, Estados Unidos mantiene el primer puesto (6,9), España se sitúa en segundo lugar con 6,3 y América Latina obtiene una valoración conjunta de 6,2, prácticamente igualada con España y a 0,7 puntos de EE UU.
Lo más sorprendente es que a China se le adjudica una nota de 5,3, que a juicio de algunos expertos puede tener mucho que ver con la actividad económica y comercial que está desarrollando el gigante asiático en el centro y sur de América. El dato es más paradójico, si cabe, si se tiene en cuenta la opinión que se tiene de China como país: entre 2011 y 2013, la imagen positiva de China cae del 65% al 53%.
“¿Acaso eso no es un fuerte mensaje de que la economía es más importante que la democracia?”, se preguntan los autores del Latinobarómetro.
Acceda aquí al informe completo:
LA_IMAGEN_DE_LOS_PAISES_Y_SUS_DEMOCRACIAS (2)