García-Margallo, ayer, con John William Ashe./ Foto: R.M./La Razón.
Luis Ayllón. Madrid.
El Gobierno español reconoce que Israel tiene derecho a defenderse ante el lanzamiento por Hamas de cohetes desde Gaza a territorio israelí, pero pide que lo haga de una manera proporcionada y respetando el derecho internacional humanitario. Así se expresó ayer en una rueda de prensa el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, manteniendo la línea de llamamiento a las partes a que hagan efectivo de inmediato un alto el fuego y den paso a una negociación de paz que garantice «el derecho de Israel a existir y el de Palestina a ser un estado viable».
España quiere ayudar a que se pueda reanudar esa negociación y, por ello, García-Margallo -que calificó la situación de «auténtica tragedia humana»- planea viajar este viernes a Egipto, tras pasar por Túnez, ya que los egipcios están tratando de actuar como mediadores en el conflicto.
La postura española con respecto a la situación en Oriente Próximo ha sido siempre la de intentar facilitar el diálogo para llegar a la solución de dos Estados, pero su influencia en Hamas ha sido prácticamente nula, incluso en la época en que Míguel Ángel Moratinos estuvo al frente del Ministerio de Exteriores, tras haber sido casi siete años enviado especial de la UE para la zona. Los interlocutores palestinos de España han sido siempre los líderes de Al Fatah, al frente de la Autoridad Nacional Palestina, porque Hamas era y sigue siendo considerado por la UE como un grupo terrorista.
Pese a todo, el Gobierno expresó su apoyo hace pocas fechas al acuerdo de Gobierno alcanzado por Mahmud Abbas con Hamas, algo que no gustó nada a los israelíes.
La relación con el Gobierno israelí ha tenido altibajos en los últimos años
La relación con Israel ha tenido bastantes altibajos y tanto el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero como el de Mariano Rajoy han condenado en los últimos años los asentamientos judíos en los Territorios Ocupados y han reclamado contención a la hora de responder a los ataques de Hamas. De hecho, está pendiente desde hace tiempo una visita del primer ministro, Benjamin Netanyahu a Madrid.
Ayer, en la rueda de prensa ofrecida por García-Margallo con el presidente de la Asamblea General de la ONU, John William Ashe, el ministro pidió una vez más el alto el fuego y dio cuenta de las gestiones realizadas para garantizar la seguridad de los españoles residentes en Gaza. Un total de 51 pudieron salir hacia Amman, mientras que 27 siguen en la Franja. De estos, 15 son residentes permanentes, dos trabajan para Naciones Unidas, otros dos para una ONG y ocho son periodistas.