Julio García. Madrid
España condenó ayer enérgicamente el brutal ataque a una sinagoga en Jerusalén en el que cuatro fieles han sido asesinados y muchos otros resultaron heridos. En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores aseguró que son igualmente repugnantes a cualquier sentimiento humano y dignas de la más contundente condena del gobierno español las expresiones de felicitación y alabanza hechas públicas por algunas organizaciones e individuos por este acto execrable.
El Ejecutivo español reiteró su rechazo de los actos o declaraciones que supongan una incitación directa o indirecta a la violencia y llamó a todas las partes concernidas a hacer todo lo posible por detener la insensata espiral de violencia que sacude la zona.